El alcornoque (Quercus Suber) es una especie arbórea que, en estado natural se circunscribe a una pequeña región del planeta, el arco mediterráneo. Sus características ambientales determinan su localización, pues requiere unas condiciones climáticas y edáficas que limitan su desarrollo a los lugares donde se combinan favorablemente esas variables.
En su estado más puro, el alcornocal es un bosque denso, con un sotobosque rico y variado de especies típicamente mediterráneas. Sin embargo, debido a su corteza, el corcho, y también a su madera, los bosques de alcornoques han sido gestionados y explotados históricamente. De tal manera que se ha mantenido a través de los tiempos una cultura relacionada con su explotación.
Hoy en día, la Sierra de Espadán es uno de los pocos lugares en el que se puede ver el bosque natural y el aprovechamiento que de él hace el hombre. En ella existen huellas de su utilización presente como también de su pasado, convirtiéndose en un ejemplo singular digno, no sólo de ser un espacio natural reconocido como Parque Natural, sino también apreciado por la sociedad como un monumento en el que naturaleza y acción del hombre llegan a un equilibrio.
El itinerario propuesto, de dificultad baja, tiene en cuenta las características ambientales y humanas, que quedan reflejadas a lo largo de su trazado de aproximadamente 10 kilómetros. Por medio de los distintos puntos de observación se podrá contemplar la estructura florística del alcornocal, sus propiedades topográficas y edáficas y, también, la historia relacionada con sus usos tradicionales y puesta en valor presente.