Descripción

La Serra Gelada, dentro de la comarca de la Marina Baixa, está considerada como uno de los primeros “parques acuáticos” de la Comunidad Valenciana. Formada por un impresionante relieve que se alza desde la planicie de Benidorm, Alfàs del Pi y Altea, da lugar a un frente litoral constituido por acantilados de más de 300 metros.

El origen, tanto de la Sierra como de los islotes Mitjana y la Isla de Benidorm, que podremos divisar desde nuestra elevada posición, es tectónico, posiblemente del comienzo del Plioceno (período Neógeno que terminó hace 2,58 millones de años). El acantilado está formado por materiales de diferente resistencia a la erosión, como areniscas calcáreas o calcarenitas, más resistentes, así como margas más erosionables. Esto confiere a la estructura del mismo un aspecto característico en el que se alternan morfologías de sucesión de cantiles y taludes que lo convierten en un paisaje singular.

La estribación occidental de la Sierra, formada por los enclaves del Tossal de la Cala, la Punta Canfali y la propia isla de Benidorm, constituyen una zona de costas bajas arenosas que dan lugar a las playas de Llevant y Ponent.

Dentro de los puntos de interés que presenta la Sierra, además de su valor botánico que le hace compartir ciertos endemismos con el vecino Peñón d´Ifach, destacan las fallas de la Punta de l´Escaleta y de la Punta de l´Albir, la presencia de dunas fósiles de difícil acceso y las cuevas de origen kárstico, entre las que podríamos mencionar la cueva del Faro de l´Albir, recientemente explotada y destacable por la presencia de estalactitas y estalagmitas en su interior.

Igualmente interesante es la Isla de Benidorm, cuyo perfil y buzamiento delatan su continuidad estructural con la Sierra favoreciendo de este modo la interpretación global del paisaje que veremos. En la actualidad, la isla no tiene una población estable aunque en el año 1834 sirvió como refugio a varias familias de Benidorm y Villajoyosa que huyeron de sus poblaciones ante la epidemia de cólera que amenazaba con destruirlas.

El itinerario se ha dividido en tres sectores con dos puntos de observación en cada uno de ellos. El primero comienza en un desvío del Sendero de la Barrina (camino que se toma a partir de la CV-753) donde iniciaremos la ascensión de la Sierra bordeando los acantilados. A lo largo del sector, veremos parte del corredor que se forma desde Altea a Benidorm y la aglomeración de edificios que ocupan gran parte de la costa, dando una idea de la presión urbanística que ha venido sufriendo la zona en los últimos años. En este sentido, la construcción de la depuradora en un punto elevado y dentro de los límites del parque, permite que se abaraten los costes de abastecimiento a la población. Además, la ubicación de la desaladora en ese mismo punto permite reducir los elevados índices de salinidad del agua tratada en la depuradora, de manera que pueda utilizarse para regar los cultivos.

El segundo de los sectores nos conducirá hasta el repetidor, vértice geodésico de la Sierra situado a 435 metros de altitud. Desde esta altura, veremos la Illeta de Penyes d´Arabí, las Ensenadas o Bahías de Altea y de Ifach así como el propio Peñón al fondo. Las vistas a lo largo del tramo y principalmente desde este punto, permitirán que tengamos una perspectiva general de la formación del paisaje que conforma la Serra Gelada.

El tercer y último de los sectores inicia el descenso hasta la Playa de l´Albir, punto final de nuestro itinerario. Tomaremos una senda que nos aleja de los acantilados para introducirnos en un pequeño bosquete de pinos y que nos llevará a enlazar con el Camino Viejo del Faro. Una vez allí, y después de atravesar la urbanización Racó de l´Albir, llegaremos a la playa donde podremos darnos un merecido chapuzón.