El Reatillo, afluente del Turia, es un ejemplo de cauce mediterráneo. Alcanza el rango de río al llevar prácticamente todo el año un caudal, que depende de las lluvias y, muy importante, del régimen de aguas subterráneas de los macizos montañosos que atravies. Además, es un río de corto recorrido, unos 50 kilómetros, con gran parte de su trazado encajado en las rocas formando un Cañón en el que contrastan los paisajes de montaña circundantes con los de agua propios del río, siendo los más característicos las piscinas naturales, un elemento singular aprovechado por las poblaciones que atraviesa, Chera y, sobre todo, Sot de Chera, como parte de su atractivo turístico.
En el río también se ha intervenido de distinta manera: con la creación de pequeños remansos para dar de beber al ganado y para la agricultura de huertas. Aunque la obra de mayor envergadura es el Pantano de Buseo, propiedad de la Generalitat Valenciana. Tiene ya un siglo de edad, habiendo perdido su función inicial de embalse para abastecimiento, Actualmente su uso es sobre todo recreativo, pues en sus orillas hay una extensa zona con distintos servicios, incluida la acampada libre.
El itinerario propuesto, de aproximadamente 8 kilómetros de longitud y dificultad fácil, va desde la población de Chera, a unos 3 kilómetros de distancia del Río, hasta la aldea de El Reatillo. Se ha dividido en dos sectores en los que se puede apreciar, en el primero, las características de las montañas circundantes al Río y, en el segundo, por medio de una senda que va por el mismo cauce, las singularidades del Cañón que se forma en ese sector.